Una de las distribuciones más importantes del mercado ya dispone de nueva versión final: Mandriva 2008 ya está disponible, e incluye las últimas mejoras tanto interna como externamente.

Aunque no sea tan popular como sus rivales, Mandriva es una distribución que se ha recuperado de un periodo de tiempo en el que sus desarrolladores no acabaron de dar con la fórmula correcta para sus usuarios.

Pero han retomado el camino, y lo han hecho de forma notable en sus dos últimas versiones. La que nos ocupa, Mandriva 2008, incluye todas las funcionalidades que podrían esperarse de una distribución Linux de última hornada.

Al kernel 2.6.22 le acompaña el sistema de ventanas X.Org 7.2, el compilador gcc 4.2 y la suite ofimática OpenOffice.org 2.2.1, aunque los usuarios notarán los cambios en los entornos de escritorio.

Precisamente en este apartado Mandriva ha puesto en juego todo el arsenal disponible en Linux actualmente, ya que se incluyen GNOME 2.20, KDE 3.5.7, una versión previa de KDE 4.0 - que no es completamente funcional, pero sirve como introducción - y además XFCE 4.4.1, el entorno ligero que tan buena acogida tienen en equipos con menos recursos.

Compiz Fusion es otra de las novedades que han integrado sus desarrolladores, que permiten a los usuarios disfrutar de los efectos visuales que hacen que nuestro escritorio se convierta en una verdadera maravilla.

El sistema de gestión de paquetes rpmdrake o la herramienta de configuración de redes draknetcenter se han visto mejoradas, y también dispondremos de un asistente para la migración de documentos - llamado transfugdrake - desde una instalación de Windows de la que queramos recuperar algunas preferencias.

Javier Pastor en The Inquirer